29.5.07

Vicios inconfesables y drogas varias

Se que no debería dejar por escrito según que cosas pero, ¡que demonios!, aquí dejo un enlace a uno de esos vicios que no me puedo quitar. No se si será la forma que tienen de moverse o las curvas, tal vez esa mirada entre dulce y salvaje...

En fin, que los menores de cierta edad tal vez no debieran ver estas cosas, así que haced el favor de ser consecuentes antes de pulsar en el enlace y adentraros en estos oscuros vicios y alejad a las mentes debiles de la pantalla.

Avisados estais...

Vicios y drogas

Y luego no os quejeis....

23.5.07

Planes y entelequias

Procedo a despotricar contra el Universo.

Como dijo algún lumbrera, "ningún plan sobrevive al contacto con el enemigo", pero a mí me gustaría llegar a comprobarlo. Al parecer hay algo que contraria al Universo respecto a mis planes, por una u otra razón nunca funcionan como deberían, ni de lejos. Al principio pensé que eran coincidencias, lo típico, cada vez que me afeito la gente decide quedarse en casa el sabado por la noche, que pena, hoy que podía quedarme hasta tarde se han ido todos de viaje, etc, etc. Pero con cada vuelta de tuerca me he ido fijando en que en realidad no pueden ser todo coincidencias, ¿verdad? Porque, pensandolo bien, ¿que probabilidad hay de que mi cara lampiña influya en la apetencia y ánimo de una docena de personas, tomadas una a una de forma aleatoria entre el conjunto cerrado de mis amigos, con respecto a salir un sabado por la noche perfectamente normal en el resto de los sentidos? Pensandolo friamente el resultado de semejante ecuación tiene que acercarse a valores cuánticos o menores.

Esto me lleva a plantearme dos opciones:

- Estoy inmerso en un Gran Hermano\El show de Truman\Supervivientes del que no soy consciente y en el que un guionista esquizoide se golpea la cabeza contras las paredes para decidir que hacer con mi vida.

En principio la he desechado por dos razones, la primera que no he visto ninguna cámara en la mayor parte de los sitios por los que me muevo. Y la segunda que ningún esquizoide llegaría a los niveles de surrealismo que ocasionalmente me rodean.

- El Universo me odia. Posiblemente porque siendo infinito (aprox.) ha de contener todo el conocimiento del universo (lo cual es cierto sin duda) y sabe que en un futuro más o menos cercano haré un plan para:
a) Hacerme con el control del universo (esclavizar el universo, ¡yum!)
b) Destruir el universo de forma inevitable (si es esto, sin duda se lo merece)
c) Ocupar su lugar como ser omnisciente, omnipresente, etc, etc.
Y siendo que intenta frustrar todos y cada uno de mis planes puedo extraer la siguiente conclusión; Sea lo que sea lo que planee lo voy a conseguir. A ver si no a que viene tanto empeño. Así pues... ¡Temblad efimeros mortales! ¡Comtemplad la llamada "ruina del universo" y refugiaros en vuestros cubiles!

Y a que viene todo esto, pues a que no monto un circo porque aparte de crecerme los enanos, los elefantes saltarían las vallas y el algodón de azucar me saldría amargo. Que no hay forma de que nada de lo que planeo, por muy cuidadosamente que lo haga, funcione como debe. Intento quedar con 8 amigos para celebrar mi cumpleaños y solo pueden aparecer 2, al final nos juntamos 11 en total pero la mayoría de ellos vinieron autoinvitados y eso (básicamente no caí en invitarlos yo), intento quedar con alguien para comer... y por problemas que no vienen a cuento, resulta imposible.

Así pues el universo impide que realize mi entelequia dejando mi vida con un aspecto de entelequia que no me agrada. ¿Quiere pelea? ¡La tendrá!

4.5.07

Treinta y la madre de todos los vicios

Pues eso que ya he cambiado de decada y, ¡Oh sorpresa!, todo sigue igual. Paso las mismas horas delante de pantallas que bombardean mis retinas con electrones y destellos fosfóricos, duermo solo cada noche, mi tensión y mi colesterol están al nivel que deberían estar los sueldos, y las ganas de hacer algo productivo no remunerado y la inspiración están al nivel que debería estar la vivienda.

Básicamente arrastro un cansancio acumulativo durante la semana que provoca que los fines de semana sólo tenga ganas de dormir, tumbarme en el sofa o la cama y dejar que las ondas herzianas anulen mis ya reducidos procesos mentales. Una de las pocas cosillas que me han animado estos ultimos dias era el conseguir un juego en concreto, Serious Sam 2, ya lo tengo, incluso hice un hueco en el saturado disco duro de mi ordenador para él, pero el muy desagradecido es incompatible con mi tarjeta gráfica. Supongo que acabaré por instalarlo en el portatil, el día que me compre un ratón como debe ser (USB por lo visto).

Me temo que puede que tarde en seguir las historias que tengo en marcha, tanto las de mesa como la del blog, porque mi parte creativa está acurrucada en un rincón, obliterada por la lógica inmanente al aprendizaje de un nuevo lenguaje de programación. En fin, calma y tranquilidad, cualquier noche de estas se enciende la bombilla de lo místico e intrascendente y se toma la revancha, mientras tanto, mis más sinceras disculpas por el retraso y, por favor, permanezcan a la espera.